Somos Campo visitó el Molino Harinero de la Cooperativa Agrícola Ganadera de Berabevú. Allí, mientras hicimos un intenso recorrido por las instalaciones, el personal nos explicó minuciosamente el proceso productivo de la harina con calidad panadera.
En el año 2010, un grupo de personas a cargo de la Cooperativa de Berabevú comenzaron a pensar en otra alternativa para explotar todo su potencial y de sumas valor agregado. Luego de una sugerencia de un economista muy importante, pusieron manos a la obra y cinco años después, el Molino estaba en marcha.
Omar Tarré, encargado del lugar lo describió de esta forma: “Arrancamos a moler a mediados de 2015, fue un proceso que llevó dos meses de prueba, en donde se molían 2 hs por semana. A inicios de 2016 empezamos a trabajar 24 hs con todo el grupo de gente incorporado, una satisfacción muy grande”.
Según relató, desde el inició la producción se mantuvo estable, moliendo 90 toneladas de harina diarias. Además, destacó que “entre 10 y 12 camiones por semana” y se envían a Córdoba, La Rioja, Santiago del Estero, Chaco y Rosario, entre otros.
Por otra parte, conversamos con Matías Zacnún, el Nutricionista de la empresa que tiene a cargo la gestión de calidad, la cual consiste en analizar el trigo en sus diferentes etapas, desde el acopio, pasando por las características comerciales, clasificación y los valores de humedad, para que luego, la producción continúe su curso.
“El trigo entra en el grupo de los cereales, hay que saberlo usar equilibradamente en porciones, aquí se elaboran harinas 000 y 0000, tienen distintos grados de finura. Yo soy partidario de que el uso equilibrado no genera un riesgo en la alimentación”, analizó el profesional.
Finalmente, intercambiamos palabras con Facundo Rodríguez, el Molinero oficial de la planta. Trabaja desde hace seis años en el lugar, luego de haber adquirido experiencia en la provincia de Córdoba.
Luego de explicarnos todo el proceso desde el ingreso hacia el embolsado, nos explicó que elaboran alrededor de 2.700 bolsas de harina. Además comentó que realizan otros tipos de harinas como las de salvado, semolines, integral y semita para consumo animal.
Sin lugar a dudas es un verdadero privilegio tener en nuestra región un proyecto de semejante envergadura, el cual a pocos años de su creación se ganó un nombre propio en el país, por la calidad de la harina y el compromiso que los lleva a seguir superando metas.
Notas Completas:
Omas Tarré - Encargado
Matías Zacnún - Nutricionista
Facundo Rodríguez - Molinero