El ministro de Hacienda anunció hoy que volverán las retenciones para el campo argentino, para poder cumplir la meta de déficit cero en 2019. Lo paradójico, es que las retenciones serán móviles.
La principal novedad en materia de retenciones es que todos los productos que exporta argentina tendrán un alícuota transversal, determinada por dos categorías, según dijo el titular de la cartera, que advirtió que se trata de una medida transitoria que regirá en 2019 y 2020.
Están aquellos, en la primera categoría -de exportaciones "primarias"- que pagarán en derechos de exportación del orden de los tres pesos argentinos por dólar exportado a valor FOB declarado, según deslizó Dujovne, mientras que, en el segundo grupo, están los servicios que tributarán 4 pesos por dólar exportado.
Esto comenzará a regir a partir de hoy en el caso de las exportaciones primarias, y a partir del 1ro de enero de 2019 para los servicios.
Dujovne advierte que se trata de una "medida de emergencia" y que, con ella, prevén recaudar $68 mil millones en lo que queda del 2018 y 280 mil millones en 2019.
Aunque el Ministro de Hacienda se refirió exclusivamente al poroto de soja, grano que estará en el segundo grupo, lo cierto es que los cambios en las retenciones también abarcarán a los cereales, trigo y maíz, los cuales también pagarán 4 pesos por dólar exportado.
De esta forma, el porcentaje en concepto de derechos de exportación que pagarán todos los granos será del 10 por ciento.
Al mismo tiempo, el poroto de soja bajó sus retenciones al 18 por ciento, porcentaje que hubiera alcanzado a finales de 2019 con la baja progresiva de 0,5 por ciento por mes, desde el actual 25 por ciento.
Con una baja al 18 por ciento de los derechos de exportación, más una retención de 4 pesos por dólar exportado, el poroto de soja tendría un alícuota de exportación del orden del 28 por ciento, por encima de lo que hoy se está pagando por harina y aceite (26 por ciento) y conforme a la competitividad que le pidió la agroindustria al presidente por estos días.