Según un informe de la Bolsa de Cereales de Rosario, la producción de soja sigue en caída, con un nuevo recorte de 3 millones de toneladas. En base a las observaciones en las distintas áreas productivas, la producción de la oleaginosa se estima en 37 millones de toneladas.
La falta de lluvias durante la primera quincena de marzo profundizó las pérdidas en toda la región pampeana. Aunque hubo mejores lluvias en la segunda quincena, sólo actuaron sobre el litoral argentino y en la costa bonaerense. De esta forma la sequía siguió extendiéndose en duración e intensidad sobre la región pampeana. Por la extensión geográfica y por la duración de este bloqueo seco, se ha evaluado que ésta ha sido la peor sequía que sufrió Argentina en los últimos 50 años.
Entre las provincias con el mayor recorte productivo se encuentran Córdoba, con 1,29 millones de toneladas menos; Buenos Aires, con una disminución de 680 mil toneladas; y Santa Fé, con una reducción de 380 toneladas.
En Entre Ríos, se estima un rinde provincial de 11 quintales para la oleaginosa. Para las zonas productivas de Chaco y Santiago del Estero, que no han recibido el auxilio que se esperaba de las lluvias, hay una variabilidad muy grande en rindes.
Esta baja en la producción no sólo afecta la economía de los productores agropecuarios, sino que afecta a la economía del país, que se vio forzado a importar de Estados Unidos casi un cuarto de millón de toneladas de soja para compensar el faltante.
Fuente: Revista Chacra